por: Lizardo Tavera Vega

Los Templos en U se ubican en los valles bajo y medio de la Costa Central (entre Huaura y Lurín), construidos al borde del límite del área cultivada de su tiempo (Burger 2010), aunque en algunos casos se ubicaron muy cerca al borde del río, como es el caso del templo en U de La Salina (valle del Rímac), que incluso parece haber perdido el "brazo izquierdo" por una antigua crecida y ligero cambio del cauce del río Rímac. También otros Templos en U como Chocas (Chillón), San Jacinto (Chancay) y Huaura (Huaura) que están próximos al cauce de los ríos, no dejando lugar para áreas cultivables entre los templos y el río.

Es característica del patrón de asentamientos de esta sociedad la construcción de varios Templos en U en una misma zona del valle (Burger 2010), que como se ha visto anteriormente y hasta donde han llegado las investigaciones arqueológicas, muchos de ellos han sido contemporáneos.

SSe tenían por costumbre renovar sus templos construyendo nuevos, pero no derruían el antiguo para levantar uno nuevo, ni construían el nuevo en otro sitio. Para renovar sus templos se construían los nuevos sobre los antiguos, copiando (repitiendo), en lo fundamental, los elementos y características arquitectónicas del anterior.

Uno de los valles más pequeños pero con gran cantidad de sitios de este período (Inicial 1,800 - 800 a.C.) es el de Lurín. La densidad de Templos en "U" en este valle es muy alta, tomando en cuenta el tamaño del valle y el área cultivable posible en esa época. La mayoría de sitios se encuentran a unos pocos cientos de metro unos de otros. Estos son los de Candela, Cardal, Mina Perdida, Parka (o San Fernando o Mina Perdida B), Manchay Bajo y Pampa Cabrera.

En el valle del Rímac encontramos principalmente a los sitios de Garagay, La Florida, Salinas, San Antonio y Azcarruns. En el valle del Chillón a Huacoy, Chuquitanta y Chocas (no se toman en cuenta a El Paraiso y Pampa Cueva porque consideramos que no forma parte de esta sociedad). En el valle de Chancay, San Jacinto, Grupo B, San Ignacio, Miraflores y Cuyo. Y en el valle de Huaura están los Templos en U de Huaura A y B.

El componente arquitectónico conocido como Brazo (lo hay derecho e izquierdo) ha sido excavado en los sitios de Garagay (llamado Estructura A por Ravines e Isbell), demostrando que no son simples plataformas, sino exquisitas pirámides con elaborados cuartos con frisos (Ravines e Isbell 1975).

Para el arquitecto Carlos Williams (Williams 1972), en su pionero artículo sobre la Tradición de los Templos en forma de U y un segundo artículo de 1978 sobre el mismo tema, considera como característica importante el que dichos conjuntos de pirámides estén orientados de igual manera, esto es con una orientación "apuntando" al Nor-Noreste. Esto lo llevó a proponer que todos los Templos en U se orientaban teniendo el mismo parámetro, quizá astronómico, apuntando a alguna estrella, constelación o algún punto luminoso del firmamento o hacia la naciente de los ríos.

Lo cierto, sin embargo, es que la orientación exacta de los Templos en U no es la misma para todos y no se ha identificado algún punto en el firmamento que corresponda a sus orientaciones.

Los primeros estudios sobre los Templos en U se basaron en el análisis de la arquitectura monumental pues no se encontró evidencia directa en esas primeras excavaciones arqueológicas de otros componentes arquitectónicos como las aldeas o áreas de habitación y actividad doméstica.

Las excavaciones de Richard L. Burger en el Templo en U de Cardal revelaron por primera vez la relación directa existente entre la arquitectura monumental y una aldea, ubicada en el área posterior a la Pirámide Principal y conectada con ésta por una escalera posterior que conducía desde la cima de dicha pirámide hasta el nivel del suelo (Burger 1992a).

En el Templo en U de Mina Perdida (valle de Lurín) los arqueólogos Burger y Salazar identifican un área doméstica directamente asociada a éstas pirámides ubicadas detrás de la Pirámide Principal y al lado oeste del Brazo Izquierdo ocupando un área aproximada de 8 hectáreas. Al igual que en Cardal, una escalera ubicada en la parte posterior de la Pirámide Principal de Mina Perdida comunica directamente a esta pirámide con el área doméstica (Burger y Salazar 2009).

Además de las áreas de vivienda directamente asociadas a los Templos en U, habrían existido otras aldeas, dispersas en el valle y vinculadas a uno de estos templos. Tal es el caso de las aldeas identificadas por el arqueólogo Jonathan Palacios en Huachipa, valle medio del río Rímac, y que estarían asociados al hoy desaparecido Templo en U de San Antonio (Palacios 1987).

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Textos y fotos: Lizardo Tavera